miércoles, 3 de diciembre de 2014

Una visionaria: Mensaje leído del Director del PIALI en el FIL Homenaje a Martha Sastrías


       Hablar de Martha Sastrías, sin temor a equivocarme, es hablar del PIALI, pues es en su proyecto donde se recoge su filosofía, su mística, su visión, su pensamiento y también su manera de soñar. El pensar que podemos unirnos mediante las palabras y regalar sueños mediante la  magia de la literatura producida para ellos y por ellos es realmente de grandes.  Es de visionarios concebir una comunidad de obreros de vocación de la palabra en todas las latitudes de nuestra América. El pensar que mediante la lectura y la palabra escrita es una manera de democratizar, dignificar y hacer libres a los niños habla de un ser humano de profundo pensamiento, claras convicciones y moralmente responsable del mundo que construimos día a día con nuestro trabajo. Martha Sastrías, es sin duda alguna, un modelo a seguir como líder en la cruzada que libramos a favor del libro y la lectura.
            Soy un ejemplo vivo de la labor de Martha Sastrías. Fui un niño que Piali en Puerto Rico invitó a escribir y regaló el sueño de compartir sus sueños con otros niños del mundo. Conocí a Martha, el 2 de octubre de 1995, en San Pedro Sula, Honduras en el III Congreso Internacional de PIALI.  Recuerdo ese momento como si fuera hoy; le pedí que se tomara una foto conmigo, nuestra miradas se cruzaron, yo un niño con ilusiones, ella con una ternura y amor que jamás he podido volver a experimentar. Ese encuentro, casual o causal, provocaría una revolución en mi vida y en mi pensamiento, permitió que un niño de 11 años encontrara su vocación, su pasión por el libro y la literatura para niños.  Ese momento fue el comienzo de un camino que hoy sigo recorriendo. Nunca imaginé que aspiraría a seguir sus pasos, a continuar su obra, a honrarle con mi trabajo.
            La visión de Martha Sastrías sigue viva y seguirá viva en cada iniciativa, en cada proyecto que el PIALI realiza. Martha esta viva en cada Mochila viajera que llega cientos de hogares en Panamá, Martha vive en la labor que realizamos en una escuela indígena en Santo Domingo de Xenacoch en Guatemala, Martha vive en cada niños que escribe y comparte sus anhelos en los talleres que ofrecemos para las comunidades marginadas de San Pedro Sula, Honduras. Martha vive en las 52 horas  anuales de programación radial, a favor de la lectura, escritura y la educación que compartimos a lo largo y ancho de Puerto Rico durante los pasados cuatro años, entre tantos otros proyectos e iniciativas.  La obra continua y no nos vamos a detener, ahora con un nuevo propósito, honrar la memoria de nuestra maestra.
            Durante el pasado mes de septiembre, se llevó a cabo el encuentro de Coordinadores del PIALI, evento que se dedicó a nuestra querida fundadora. El momento fue propicio para comunicar que PIALI realizará cada año durante el mes de noviembre, mes en que recordamos el nacimiento de nuestra fundadora, una gran fiesta en cada Coordinación del PIALI en los diversos países, en torno al libro y la lectura en niños y jóvenes, como un homenaje a ella. De igual manera, cada año se otorgará el Premio Martha Sastrías, a una persona, entidad o proyecto en torno a la promoción de la lectura.
            En conclusión podría extensamente hablar sobre la gran mujer, maestra y líder que es Martha Sastrías, pero más deben hablar mis acciones a alcanzar su visión. A su familia, le puedo decir que tienen un hermano más en Puerto Rico.  Me atrevo a decirle que su familia es muy extensa, innumerables personas, profesionales y voluntario que incansablemente trabajan por regalar sueños. La comunidad y la familia Pialina son también su familia.  Todo mi compromiso y dedicación; un agradecimiento especial a Marisol Schuelz y al FIL  Guadalajara por este espacio, este homenaje pues un reconocimiento a Martha, es un reconocimiento a PIALI.
Bendiciones  ¡Siempre unidos por la magia de las palabras ¡


Jesuan Texidor Santiago, Director Ejecutivo

1 comentario:

  1. De Martha nos quedan los recuerdos, pero lo más importante lo que aprendimos de ella, ese amor por la lectura y como compartirlo con los demás. Su recuerdo vivirá para siempre entre los que la conocimos y mantendremos su programa PIALI como una herencia para las nuevas generaciones de lectores.

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